Las mujeres de Benahadux han dado todo un ejemplo de unión y solidaridad con la organización de una actividad emotiva, cuanto menos entrañable, por la que se ha conseguido recaudar fondos para la asociación AMAMA. Bajo el nombre 'Novias en el recuerdo, la asociación Benarax promovió en la noche del sábado, bajo
la luz de la luna, el desfile de casi medio centenar de vestidos de novia con una larga vida en presencia de las que en su día los portaron. Eran trajes del pasado siglo, incluso los había de los años treinta, y fueron exhibidos ante el público que se concentró ante la explanada del parque municipal por mujeres, tanto solteras como casadas, de todas las edades, mientras sonaba la dulce voz de la soprano María José Romero y su pianista José Luis, de la asociación LUNA. Una cita ineludible para los vecinos de la localidad del Bajo Andarax, quienes también correspondieron el esfuerzo solidario de Benarax contribuyendo al consumir en la barra de bar de tapas caseras y al comprar productos artesanales que habían elaborado las mujeres de la asociación en días previos para recaudar más fondos. Decía Concepción Arenal, que no es tiempo perdido el que se emplea en procurar hacer el bien. Pues así llevan semanas las mujeres de un colectivo que ha crecido de forma considerable en los últimos años y que se ha convertido en todo un referente para el tejido asociativo de la comarca. Cada actividad que tocan es un éxito de participación porque se implican al máximo las 180 socias y reman en la misma dirección. El alcalde de Benahadux, Juan Jiménez, y la presidenta de la Asociación de Mujeres Almerienses Masectomizadas (AMAMA), Belinda Pérez, felicitaron al colectivo benahaducense por su implicación en una causa que lo merecía. Ataviadas con trajes del pasado fueron desfilando una tras otra hasta el medio centenar mientras se disparaban los flashes de las cámaras y la gente aplaudía. Sonaban acordes nupciales y algunas mujeres, las que en su día protagonizaron su boda con esos vestidos, no podía reprimir las lágrimas. La concejala Lola Plaza no dudó en sumarse a la iniciativa luciendo el vestido con el que hace treinta años contrajo matrimonio. Y no había mejor manera de celebrar la efeméride que dando un sí quiero nuevamente, pero esta vez de forma benéfica.
Las mujeres que habían cedido sus vestidos recibieron un pequeño recuerdo de las portadoras al finalizar el desfile y después fue el turno de la música y la barra de bar. Fue una noche de emociones, de recuerdos, de bailes durante la madrugada y, sobre todo, de una solidaridad de mujer a mujer. La asociación Benarax, constituida en 2004, celebrará el próximo año su décimo aniversario. De seguir así serán muchos más los que cumplan porque cuando la causa es benéfica están siempre al pie del cañón, con esfuerzo y la mayor de las ilusiones. "Llevadera es la labor cuando muchos comparten la fatiga". La frase de Homero bien sirve para ilustrar el trabajo que vienen realizando en grupo estas 180 mujeres de Benahadux encabezadas por Isabel María Corbalán y Patro Úbeda.